domingo, 21 de diciembre de 2008

LA HISTORIA PARA NO SER VISTO


La historia para no ser visto incluye callar cuando los demás te gritan al oído para obligarte a hacer lo que no quieres. La historia para no ser visto contiene la mordaza para aguantar un salario bajo con una sonrisa feliz. La historia para no ser visto presenta un manual de actos protocolarios a los que hay que asistir para no destacar como rebelde o antisocial: bodas, bautizos y comuniones. La historia para no ser visto es la novela de la rutina aburguesada de los que han sido desvitalizados por el consumismo desaforado y la hipoteca feroz. La historia para no ser visto se regala con un manual de autoayuda para cambiarse a uno mismo y en un futuro lejano, lejanísimo cambiarnos a todos. La historia para no ser visto viene con banderín de patriota con fronteras de colorines. La historia para no ser visto se asimila mejor con un dosificador de racismo por goteo. La historia para no ser visto se entiende mejor con la televisión encendida después de una copiosa cena precocinada. La historia para no ser visto no se absorbe bien si se acude a manifestaciones o expresiones públicas de repulsa del sistema socio-económico impuesto. La historia para no ser visto es continuadora de Harry Potter y la Play Estation. La historia para no ser visto recomienda dejar siempre vacías las tres primeras filas de butacas de un acto público para garantizar nuestro pavor a ser protagonistas de nuestra propia vida. La historia para no ser visto es compatible con hacer lo que debes y pagar por lo que deseas. La historia para no ser visto garantiza tu invisibilidad absoluta y tu conversión en un hombre-mujer robot con función asignada y rebeldía amputada. La historia para no ser visto asegura una vida planificada,libre de ataduras y compromisos de cambio social. La historia para no ser visto te permitirá votar lo existente sin replantearte por la creación de algo nuevo. La historia para no ser visto te sumirá en un anonimato maravilloso para formar parte del electorado, la audiencia y la opinión pública. La historia para no ser visto es incompatible con dar el primer paso o en ser el último en dar el último.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

No quiero ser anonima!! Me ha encantada tu historia, ingeniosa y activadora neuronal. Enhorabuena por tu blog!

Anónimo dijo...

Chapeaou amigo! Me suelo sentar siempre en las charlas en las ultimas butacas... paro sabes que? Eso se acabo!! Y pienso, ademas, hacer preguntas al ponente de turno! Me encanta la idea de ser protagonistas, por lo menos de nuestras propias vidas, no?

ESENCIA dijo...

Jose , !se sale¡ , me recuerda a cosas que escribo yo pero desde otro estilo, el tuyo es narrativo y cojonudo!!!!!!